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Navegación del Paciente Oncológico: Una Estrategia Transformadora para la Atención Continua del Cáncer

  • Foto del escritor: Jefferson Andres Bautista Gomez
    Jefferson Andres Bautista Gomez
  • 16 jun
  • 3 Min. de lectura

Por Luis Rojas


CEO de S4L Healthtech | Especialista en Estrategias de Valor en Salud


Patient navigation

Introducción



La navegación del paciente ha emergido como un modelo esencial para reducir las desigualdades en el acceso y la continuidad de la atención del cáncer. Aunque múltiples revisiones sistemáticas ya han documentado su efectividad, el estudio reciente publicado en CA: A Cancer Journal for Clinicians (Chan et al., 2023) representa el primer compendio global que armoniza evidencia empírica, barreras de implementación, resultados clínicos y económicos, y recomendaciones de política pública. Este blog resume y expande los hallazgos de esta revisión integral, ilustrando por qué la navegación del paciente debe ocupar un lugar central en los sistemas de salud modernos.



¿Qué es la Navegación del Paciente en Cáncer?



La navegación del paciente en cáncer es una intervención individualizada diseñada para superar barreras y facilitar el acceso oportuno a los servicios de diagnóstico y tratamiento (ver Imagen 2). Sus principales características incluyen:



  • Identificación y superación de barreras estructurales (idioma, transporte, acceso financiero, alfabetización en salud).


  • Apoyo emocional, educativo e informativo durante todas las fases del cáncer.


  • Aplicación en distintos puntos de la trayectoria oncológica: desde la detección temprana hasta los cuidados paliativos.


  • Participación de distintos perfiles profesionales y comunitarios, desde enfermeros hasta navegadores no clínicos, como promotores de salud.



Resultados: ¿Por qué Funciona la Navegación?



La revisión demuestra una asociación sólida entre programas de navegación y:



  • Mayor participación en programas de tamizaje (mamografías, pruebas de Papanicolaou, colonoscopías).


  • Reducción del tiempo desde el tamizaje hasta el diagnóstico, y desde el diagnóstico al inicio del tratamiento.


  • Mejora en la satisfacción del paciente y su calidad de vida durante la fase de supervivencia.


  • Disminución de las tasas de reingreso hospitalario durante el tratamiento activo.



Estos beneficios están especialmente bien documentados en poblaciones vulnerables, como personas de bajos ingresos, minorías étnicas y zonas rurales.



Implicaciones para Actores Clave



Los hallazgos de este trabajo tienen consecuencias directas para tres grupos estratégicos:



1. Proveedores de Cuidado



  • La navegación debería priorizar áreas donde ya se ha demostrado efectividad (ver Imagen 1).


  • La incorporación del componente emocional y cultural es fundamental para poblaciones desatendidas.


  • El acompañamiento debe incluir apoyo al cuidador, continuidad de la atención, y promoción de la autogestión.



2. Investigadores



  • Se requiere estandarizar la definición, alcance y competencias del rol de navegador.


  • El desarrollo de soluciones tecnológicas (IA, bots de navegación, telesalud) es clave para la escalabilidad.


Existen brechas críticas de investigación en cuidados paliativos, cánceres raros, fases avanzadas y en contextos no estadounidenses.



3. Formuladores de Política



La sostenibilidad financiera es un factor clave. Se requiere un modelo de negocio desde el inicio (Imagen 1).


  • La capacitación debe estar basada en marcos de competencia consensuados.


El enfoque de “valor en salud” o Quintuple Aim debe guiar la planificación: equidad, bienestar del clínico, experiencia del paciente, desenlaces clínicos y costos.



Barreras y Facilitadores



Uno de los aportes más relevantes de la revisión es el desglose de barreras y facilitadores según niveles sistémico, profesional e individual (ver Imagen 3). Algunas lecciones clave:



  • En la detección temprana, persisten dificultades como falta de políticas claras, bajo nivel de referencia y estigmas culturales.


  • La educación, el uso de tecnología y los equipos culturalmente competentes son facilitadores efectivos.


  • La población indígena y migrante requiere enfoques culturalmente seguros y adaptados a su contexto.



¿Qué Falta por Hacer?



  • Evaluar la efectividad del modelo en otros tipos de cáncer y en sistemas fuera de EE. UU.


  • Ampliar estudios que incluyan desenlaces clínicos duros (supervivencia, progresión).


  • Desarrollar e investigar soluciones tecnológicas para navegación (IA, asistentes virtuales, chatbots).


Establecer estándares internacionales que definan claramente quién puede ser navegador, cuál es su rol y cómo se evalúa su impacto.



Conclusión



La navegación del paciente oncológico ha dejado de ser una promesa para convertirse en una herramienta transformadora. Al reducir inequidades, mejorar tiempos críticos y fortalecer la experiencia del paciente, esta estrategia se alinea perfectamente con los principios de una atención centrada en valor. Sin embargo, para que su impacto sea sostenible y universal, se requiere una planificación específica por contexto, inversión en formación y tecnología, y un fuerte respaldo desde la política pública.



El momento de escalar la navegación del paciente ha llegado. No solo es una buena práctica clínica, es un imperativo ético y económico.



Referencias clave



Chan, R.J., Milch, V.E., Crawford-Williams, F., et al. (2023). Patient navigation across the cancer care continuum: An overview of systematic reviews and emerging literature. [CA: A Cancer Journal for Clinicians](https://doi.org/10.3322/caac.21788)


Oncology Nursing Society. (2017). Oncology Nurse Navigator Core Competencies.


AONN+. (2020). Navigation Metrics Toolkit.



¿Te interesa implementar navegación del paciente en tu institución? Escríbeme y exploremos juntos cómo hacerlo realidad con tecnología, formación y un modelo costo-efectivo adaptado a tu contexto.

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